Se diferencia también de otros tipos de masajes por el uso de ropa del receptor —siendo la recomendación usar ropa ancha, cómoda y que permita la movilidad—, y la ausencia del uso de aceites corporales.
Es recomendable no realizar comidas copiosas antes del masaje, dado que las manipulaciones corporales pueden verse alteradas por el propio proceso digestivo.
El masaje es cálido y interactivo, se trabaja de pies a cabeza mediante presiones, manipulaciones de las articulaciones, estiramientos, tracciones y desbloqueos. Según el grado de tolerancia de cada persona, el masaje puede ser más o menos intenso y es necesario que el terapeuta esté informado del estado de salud del receptor teniendo en cuenta dolencias, lesiones y/o problemas de salud en general.
Recibir un Masaje Tailandés completo deja una impresión emocional reflejada en cuerpo y alma durante los días siguientes.